La clasificación del cociente intelectual se hace de acuerdo a:
a) La edad de los sujetos
b) Los valores obtenidos
c) La prueba psicológica
d) La medición psicológica
e) La evaluación intelectual
Resolución:
La clasificación del cociente intelectual (CI) se hace principalmente de acuerdo a los valores obtenidos en una prueba psicológica diseñada específicamente para medir esta capacidad. Por lo tanto, la respuesta correcta sería la opción b) Los valores obtenidos. Sin embargo, para una comprensión más amplia del tema, es importante explorar cómo funcionan las pruebas de CI, cómo se desarrollan y cómo se interpretan.
El cociente intelectual es un valor numérico derivado de un conjunto de pruebas estandarizadas que evalúan diferentes capacidades cognitivas como la memoria, el razonamiento lógico, la comprensión verbal y la habilidad espacial, entre otras. Estas pruebas están diseñadas para proporcionar una medida de la inteligencia relativa de un individuo en comparación con su grupo de referencia. El resultado de estas pruebas se traduce en un valor numérico conocido como el CI.
Históricamente, el concepto de cociente intelectual se originó a principios del siglo XX con el psicólogo Alfred Binet, quien desarrolló la primera prueba de inteligencia para identificar a los estudiantes que necesitaban ayuda adicional en la escuela. La fórmula original de Binet para calcular el CI era el resultado de dividir la "edad mental" de un individuo por su "edad cronológica" y multiplicar el resultado por 100. Sin embargo, hoy en día, este método ha sido reemplazado por técnicas de puntuación más modernas.
Las pruebas modernas de CI, como la Escala Wechsler de Inteligencia para Adultos (WAIS) o la Escala de Inteligencia de Stanford-Binet, utilizan una metodología de puntuación basada en la desviación estándar. Esto significa que un CI de 100 se considera promedio, ya que es la puntuación que se obtiene al estar en el centro de la curva normal de distribución. Las puntuaciones por encima de 100 indican un rendimiento superior al promedio, mientras que las puntuaciones por debajo de 100 indican un rendimiento inferior al promedio. La desviación estándar comúnmente utilizada en estas pruebas es de 15 puntos.
La clasificación del CI se basa entonces en los valores numéricos obtenidos. Generalmente, se utilizan categorías como las siguientes: un CI inferior a 70 puede indicar deficiencia intelectual; un CI de 70 a 85 se considera por debajo del promedio; un CI de 85 a 115 es promedio; un CI de 115 a 130 es superior al promedio, y un CI superior a 130 se considera significativamente superior al promedio, a menudo identificado como "superdotado".
Es fundamental entender que el CI es solo una medida de ciertos aspectos de la inteligencia y no capta la totalidad de las capacidades cognitivas de un individuo. Factores como la creatividad, la inteligencia emocional, las habilidades prácticas y el pensamiento crítico no siempre se reflejan en las pruebas de CI estándar. Además, el contexto cultural, educativo y emocional del individuo puede influir en su rendimiento en estas pruebas.
En conclusión, la clasificación del cociente intelectual se realiza principalmente en base a los valores obtenidos en las pruebas estandarizadas. Sin embargo, es importante utilizar esta información de manera complementaria a otras evaluaciones y observaciones para obtener una comprensión completa de las capacidades y potencialidades de una persona. Además, es crucial considerar la diversidad de habilidades y talentos que no siempre son capturados por las pruebas de CI.