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Ejercicicio N° 03

Lesson 3/58 | Tiempo de estudio: 3 Min

Para ser considerado genio, según Terman, un sujeto debería obtener un C.I. de ……………… o más.

a) 130

b) 129

c) 138

d) 140

e) 150

Resolución:

La pregunta que planteas está relacionada con el concepto del Cociente Intelectual (C.I.) y cómo este se ha utilizado históricamente para medir la inteligencia y, en algunos casos, para identificar a las personas consideradas "genios". Lewis Terman, un psicólogo estadounidense, es conocido por su trabajo en la adaptación y ampliación de la prueba de inteligencia de Binet-Simon, que dio lugar al test de Stanford-Binet. Este test fue una de las primeras pruebas de inteligencia que se aplicaron ampliamente en los Estados Unidos y ha tenido un impacto duradero en la psicología educativa y la medición de la inteligencia.



Lewis Terman también es famoso por su estudio longitudinal de personas con alto C.I., conocido como el "Estudio de los Genios de Terman". Este estudio comenzó en 1921 y siguió a un grupo de niños con altos resultados en pruebas de inteligencia a lo largo de sus vidas, para investigar cómo el alto C.I. influía en su desarrollo y logros futuros. Terman consideraba que un C.I. de 140 o más era indicativo de "genialidad" o "talento excepcional". Por lo tanto, la respuesta correcta a la pregunta sería la opción d) 140.



Sin embargo, es importante entender que la definición de "genio" es más compleja y multifacética que simplemente un número en una prueba de inteligencia. La inteligencia humana es diversa y no se limita a lo que puede medirse con un test de C.I. Tradicionalmente, el C.I. se ha utilizado para evaluar habilidades como el razonamiento lógico, la comprensión verbal, la memoria y las habilidades matemáticas. Sin embargo, muchos psicólogos y educadores argumentan que la inteligencia también incluye otras dimensiones, como la inteligencia emocional, la creatividad, las habilidades prácticas y el pensamiento crítico.



Además, el contexto histórico y cultural influye significativamente en cómo percibimos y valoramos la inteligencia. En el período en que Terman desarrolló sus ideas, la sociedad estaba muy centrada en identificar y cultivar habilidades intelectuales que se consideraban útiles para el progreso científico y tecnológico. Por lo tanto, las pruebas de inteligencia eran vistas como herramientas valiosas para identificar a individuos que podrían contribuir significativamente a esos campos.



Hoy en día, aunque el C.I. sigue siendo una medida relevante en ciertos contextos, hay un reconocimiento creciente de que no es el único indicativo de potencial o habilidad. Por ejemplo, en la teoría de las inteligencias múltiples de Howard Gardner, se argumenta que la inteligencia no es unitaria sino que se compone de múltiples capacidades distintas, como la inteligencia musical, interpersonal, kinestésica, entre otras.



Además, el concepto de genio también puede implicar una combinación de factores, incluyendo la pasión, la perseverancia, el ambiente y las oportunidades disponibles, además del C.I. La genialidad se puede manifestar en muchos campos, no solo en los que tradicionalmente se asocian con alta inteligencia académica, como la ciencia o las matemáticas, sino también en el arte, la literatura, el liderazgo y otras áreas creativas y humanísticas.



En resumen, mientras que Terman consideraba un C.I. de 140 o más como un marcador de genialidad, es fundamental adoptar una perspectiva más amplia y comprensiva de lo que significa ser un "genio". La inteligencia y el talento son fenómenos complejos que van más allá de una simple cifra, y reconocer esta diversidad nos permite apreciar mejor las contribuciones únicas que cada individuo puede hacer a la sociedad.