Los primeros momentos del movimiento obrero en la lucha por las reivindicaciones laborales en el Perú tuvieron una tendencia política ………………
a) Comunista
b) Asistencialista
c) Anarquista
d) Corporativista
e) Socialista
Resolución:
La respuesta correcta es la opción c) Anarquista.
Para entender mejor esta respuesta, es importante situarnos en el contexto histórico y social del Perú durante la República Aristocrática, que abarca aproximadamente desde 1895 hasta 1919. Este período se caracteriza por el dominio de una élite oligárquica en la política y la economía del país, así como por significativos cambios sociales y económicos.
Durante la República Aristocrática, el Perú experimentó una serie de transformaciones debido a la modernización y expansión de la economía, especialmente en sectores como la agroexportación (azúcar, algodón) y la minería. Estas industrias, principalmente en manos de una élite criolla, generaron una creciente demanda de mano de obra, lo que atrajo a muchos trabajadores rurales a las ciudades y a las áreas de producción. Como consecuencia, surgieron nuevos problemas sociales, entre ellos la explotación laboral, las malas condiciones de trabajo y la falta de derechos para los trabajadores.
En este contexto, el movimiento obrero en el Perú comenzó a organizarse y a luchar por mejores condiciones laborales y derechos. Inicialmente, las ideas y las influencias anarquistas jugaron un papel predominante en la configuración del movimiento obrero peruano.
El anarquismo, una ideología que propugna la abolición del Estado y la creación de una sociedad basada en la autogestión y la cooperación voluntaria, llegó al Perú a través de inmigrantes europeos y trabajadores que habían sido influenciados por las ideas anarquistas en otros países. Estas ideas encontraron un terreno fértil entre los trabajadores peruanos, quienes veían en ellas una respuesta a la opresión y la explotación que sufrían.
Una figura clave en la difusión del anarquismo en el Perú fue Manuel González Prada, un intelectual y escritor que criticó duramente a la oligarquía y abogó por la emancipación de los trabajadores. Sus escritos y discursos inspiraron a muchos obreros a organizarse y a luchar por sus derechos. González Prada promovió la idea de la acción directa, es decir, la lucha sin intermediarios, y la importancia de la educación y la cultura para la liberación del proletariado.
Los primeros sindicatos y organizaciones obreras en el Perú, como la Federación de Obreros Panaderos "Estrella del Perú", fundada en 1887, y la Sociedad de Resistencia de Tipógrafos, fundada en 1905, adoptaron principios y tácticas anarquistas. Estas organizaciones se centraron en la lucha por la jornada laboral de ocho horas, mejores salarios y condiciones de trabajo, así como en la solidaridad y la autoeducación de los trabajadores.
Una de las manifestaciones más importantes del movimiento obrero anarquista fue la huelga general de 1919, que logró la instauración de la jornada laboral de ocho horas en el Perú. Este logro fue un hito en la historia del movimiento obrero peruano y demostró la efectividad de la organización y la movilización de los trabajadores.
Sin embargo, es importante mencionar que, con el tiempo, otras corrientes ideológicas comenzaron a influir en el movimiento obrero peruano, como el socialismo y el comunismo, especialmente a partir de la década de 1920. Estas corrientes trajeron nuevas perspectivas y estrategias a la lucha obrera, pero el anarquismo sentó las bases iniciales y jugó un papel crucial en los primeros momentos de la organización y las reivindicaciones laborales en el Perú.
En resumen, los primeros momentos del movimiento obrero en el Perú estuvieron marcados por una tendencia política anarquista, caracterizada por la lucha directa, la autogestión y la búsqueda de mejores condiciones laborales y derechos para los trabajadores. Esta etapa fue fundamental para el desarrollo posterior del movimiento obrero en el país y dejó un legado significativo en la historia de las luchas sociales en el Perú.