Los ……………… fueron los narradores que disfrutaron la literatura culta en el mundo pre-hispánico.
a) Aedas
b) Rapsodas
c) Haravicus
d) Juglares
e) Amautas
Resolución:
En la época prehispánica, las culturas que florecieron en lo que hoy conocemos como América Latina desarrollaron formas de expresión literaria que, aunque no se asemejaban a la literatura escrita y publicada como la conocemos hoy, eran igualmente ricas y complejas. En el caso del mundo andino, encontramos figuras que desempeñaron un papel crucial en la preservación y transmisión del conocimiento y la cultura a través de la oralidad. En este contexto, los "haravicus" fueron los narradores que disfrutaron de la literatura culta en el mundo prehispánico.
La palabra "haravicus" proviene del quechua, idioma nativo de los Andes, y se refiere a los poetas o bardos que componían y recitaban poemas y cantos. Estos individuos eran altamente respetados en sus comunidades debido a su habilidad para manejar el lenguaje de manera artística y sofisticada. Su labor era fundamental, ya que a través de sus recitaciones mantenían vivas las tradiciones, mitos, y leyendas de sus pueblos. A menudo, los haravicus eran considerados como una suerte de intermediarios entre los dioses y los hombres, pues sus composiciones a menudo incluían mensajes divinos o tenían propósito ceremonial.
En el contexto del Tahuantinsuyo, el imperio incaico, la literatura oral tenía un papel significativo. Los incas no desarrollaron un sistema de escritura alfabético como el que conocemos, pero sí contaban con los "quipus", un sistema de cuerdas con nudos que servía para registrar información. Sin embargo, para la transmisión de historias, conocimientos y valores culturales, la oralidad era primordial. En este sentido, los haravicus desempeñaban un rol similar al de los aedas en la antigua Grecia o los rapsodas que, al igual que los haravicus, recitaban extensos poemas épicos y eran considerados guardianes de la cultura oral.
La importancia de los haravicus radica también en su capacidad para educar y entretener a través de sus relatos. En las ceremonias y festividades, sus cantos y poemas eran una forma de instruir a los jóvenes sobre las hazañas y enseñanzas de sus ancestros, así como de inculcar valores morales y sociales. Este legado oral contribuía a la cohesión de la comunidad y al fortalecimiento de la identidad cultural, factores esenciales para la supervivencia y prosperidad de cualquier civilización.
En contraste, los "amautas" eran los sabios o maestros en el mundo andino, encargados de la enseñanza del conocimiento científico y filosófico. Aunque ambos, amautas y haravicus, compartían un interés por la sabiduría y la cultura, sus roles diferían en cuanto al enfoque y el método de transmisión. Mientras los amautas se centraban en la educación formal de los hijos de la élite incaica, los haravicus tenían un papel más cultural y artístico.
Por otro lado, los aedas y los rapsodas pertenecen a la tradición griega, y los juglares a la europea medieval, lo que los sitúa fuera del contexto prehispánico andino. En resumen, los haravicus fueron los encargados de disfrutar y difundir la literatura culta en el mundo prehispánico a través de su arte poético y narrativo, cumpliendo una función vital en la transmisión del conocimiento oral y cultural de su tiempo.