No es considerado ejemplo de inmunidad natural:
a) Ácido clorhídrico
b) Lisozima
c) Macrófago
d) Epitelio respiratorio con cilios
e) Anticuerpos
Resolución:
Para abordar esta pregunta, primero debemos entender qué es la inmunidad natural y cómo se diferencia de otros tipos de inmunidad. La inmunidad natural, también conocida como inmunidad innata, es la primera línea de defensa de nuestro cuerpo frente a patógenos como bacterias, virus y otros microorganismos. Se caracteriza por ser una respuesta rápida y no específica, lo que significa que actúa de la misma manera independientemente del tipo de patógeno al que se enfrente. La inmunidad natural incluye barreras físicas, químicas y celulares que protegen al organismo de las infecciones.
Ahora, vamos a examinar cada una de las opciones proporcionadas para identificar cuál no es un ejemplo de inmunidad natural.
a) Ácido clorhídrico: El ácido clorhídrico es una sustancia química que se encuentra en el estómago y ayuda a descomponer los alimentos. Además, crea un ambiente extremadamente ácido que mata a muchas bacterias y patógenos que ingerimos con los alimentos. Esta función protectora es parte de la inmunidad natural, ya que es una barrera química que impide que los microorganismos dañinos prosperen en el sistema digestivo.
b) Lisozima: La lisozima es una enzima que se encuentra en varias secreciones corporales como las lágrimas, la saliva y el moco. Su función principal es romper las paredes celulares de ciertas bacterias, lo que las destruye y previene infecciones. Al ser un mecanismo de defensa que actúa de manera no específica, la lisozima también forma parte de la inmunidad natural.
c) Macrófago: Los macrófagos son células inmunitarias que desempeñan un papel crucial en la respuesta inmune innata. Estas células se encargan de fagocitar, es decir, ingerir y destruir patógenos y restos celulares. Además, ayudan a activar otras células del sistema inmunitario. Debido a su participación en la defensa inicial contra infecciones, los macrófagos son un componente de la inmunidad natural.
d) Epitelio respiratorio con cilios: El epitelio respiratorio recubierto de cilios es una barrera física que protege al sistema respiratorio de patógenos y partículas extrañas. Los cilios son pequeñas estructuras similares a pelos que se mueven para expulsar el moco cargado de partículas y microorganismos fuera del tracto respiratorio. Esta función de barrera y limpieza es parte de la inmunidad natural.
e) Anticuerpos: Los anticuerpos, también conocidos como inmunoglobulinas, son proteínas producidas por el sistema inmunitario que específicamente reconocen y se unen a antígenos, que son sustancias extrañas en el cuerpo. Los anticuerpos forman parte de la inmunidad adquirida o adaptativa, que es específica y se desarrolla con el tiempo después de la exposición a patógenos. A diferencia de la inmunidad natural, que responde de manera general a los patógenos, la inmunidad adquirida es específica y tiene memoria, lo que significa que puede recordar y responder de manera más eficaz a patógenos previamente encontrados.
En conclusión, entre las opciones dadas, los anticuerpos (opción e) no son un ejemplo de inmunidad natural, ya que pertenecen al sistema de inmunidad adaptativa. Las otras opciones (ácido clorhídrico, lisozima, macrófagos y epitelio respiratorio con cilios) son todas componentes de la inmunidad innata, que actúa como primera línea de defensa del organismo.