+51 956 441 346
contacto@hatun.app

Ejercicio N° 03

Lesson 3/60 | Tiempo de estudio: 3 Min

En cuanto al apelativo de “el manco de Lepanto” referido a Miguel de Cervantes Saavedra:

a) Se lo pusieron los escritores del neoclasicismo.

b) Se lo pusieron los escritores de la generación del 98.

c) Hacía alusión a la perdida de movimiento de su brazo izquierdo como consecuencia de haber sido herido en la batalla de Lepanto.

d) Hacía alusión a la derrota que los españoles sufrieron en la batalla de Lepanto frente a la armada turca.

e) Hacía alusión a la falta de temple de Cervantes durante la batalla de Lepanto.

Resolución:

El apelativo de "el manco de Lepanto" referido a Miguel de Cervantes Saavedra es una de las denominaciones más conocidas y significativas en la historia de la literatura. Esta expresión se encuentra directamente relacionada con un episodio crucial en la vida de Cervantes: su participación en la Batalla de Lepanto y las consecuencias físicas que este evento tuvo en su cuerpo. Comprender el origen y la razón de este apodo nos lleva a explorar tanto la biografía de Cervantes como el contexto histórico de la época.



Miguel de Cervantes Saavedra, nacido en Alcalá de Henares en 1547, es considerado uno de los escritores más importantes de la literatura española y universal. Su obra más famosa, "Don Quijote de la Mancha", ha dejado una huella imborrable en la cultura literaria. Sin embargo, antes de alcanzar la fama literaria, Cervantes tuvo una vida llena de aventuras y desafíos, muchos de los cuales influyeron profundamente en su obra.



En 1571, Cervantes se alistó en la armada de la Liga Santa, una coalición formada por diversas fuerzas cristianas, entre ellas las de España, el Papado y Venecia, para enfrentar la expansión del Imperio Otomano en el mar Mediterráneo. El 7 de octubre de ese año, tuvo lugar la Batalla de Lepanto, que se libró en el golfo de Patras, cercano a la ciudad griega de Lepanto. Esta batalla es considerada una de las más importantes del siglo XVI, ya que detuvo el avance otomano en el Mediterráneo occidental.



Durante la batalla, Cervantes luchó valientemente a bordo de la galera "Marquesa". A pesar de estar enfermo, insistió en participar activamente en el combate, mostrando un notable sentido del deber y valor. Fue en este enfrentamiento donde Cervantes recibió tres heridas de arcabuz: dos en el pecho y una en la mano izquierda. Esta última lesión fue de tal gravedad que le dejó a Cervantes sin el uso de su mano, una discapacidad que llevaría el resto de su vida. Debido a esta pérdida funcional, Cervantes fue apodado "el manco de Lepanto". Cabe destacar que el término "manco" se refiere aquí a la falta de movilidad en su mano, no a la pérdida completa de su brazo.



Por tanto, la opción correcta sobre el origen del apodo "el manco de Lepanto" es la opción c): "Hacía alusión a la pérdida de movimiento de su brazo izquierdo como consecuencia de haber sido herido en la batalla de Lepanto". Este apodo no solo subraya su participación heroica en uno de los eventos militares más significativos de su tiempo, sino que también refleja el respeto y reconocimiento que Cervantes recibió por su valentía.



Es importante mencionar que este apodo no fue acuñado por escritores del neoclasicismo ni de la generación del 98, y tampoco está relacionado con una derrota en Lepanto, ya que la batalla fue una victoria para las fuerzas cristianas. Tampoco señalaba una falta de temple de Cervantes durante la batalla, ya que, al contrario, su participación fue vista como un acto de coraje.



El legado de Cervantes, enriquecido por sus experiencias personales y su resiliencia ante las adversidades, sigue siendo una fuente de inspiración y estudio. Su vida y obra nos recuerdan que los desafíos personales pueden convertirse en una poderosa fuente de creación artística y literaria.